Empezamos jiggeando en la isla San Pedro Nolasco, logramos tres buenos jurelones y uno perdido en las piedras, además de una bonita.
Después nos fuimos a trolear a los dorados, habia muchos pero chicos.
Lo divertido fue que cuando jaló uno en una plumita, lo dejamos en el agua y se juntaron muchos debajo de la lancha, lo que permitió sacarlos con jiggs.
Peque Almada, su esposa Gaby y yo, pasamos una muy buen día, con el mar totalmente tranquilo.



Pd. solo para saber quienes visitan este blog, les pido que se reporten en los comentarios. Saludos a todos.